Inmutable
3:00 am el reloj señala la hora, los espasmos estridentes de ideas saturan mis sentidos, el ardor matutino de la cama se hace presente, la maquina incesante de impulsos condena y ataca a cada una de mis rutas neurales, el sudor moja mi piel, el tic tac del reloj hace eco en la habitación, hasta el mínimo rincón ocupado por la criatura más insignificante tiene la misma preocupación ¿Qué pasa?, ¿Qué ocurre?.
El silencio, perteneciente a la madrugada, indica algo, señala paso tras paso la acción por venir; nadie lo sospecha, los libros incluso permanecen más quietos que de costumbre, las sabanas cuchichean en un lenguaje desconocido, hasta la mosca que ha caído en la telaraña sospecha algo y calla… mi cuerpo no puede más.
Con la acción de cada movimiento provocado por la ira incoherente del insomnio se descarga con furia un centenar de azotes sobre mi ¿Que he hecho yo para merecer esto?- me pregunto desesperado-, al siguiente instante, recuerdos y problemas vienen a mí psique, hacen bulla en mi cerebro y uno de ellos se acerca cada vez más al centro de mi mente, de repente, comienzo el dialogo con él: –Sí, sí, tú has sido relegado al exilio, tú, sí, a tí te recuerdo-jaja (ríe descarado)- Qué has de saber tú de mí que yo no pueda saber, tú me condenaste, tú me apartaste de tu vida, creíste que podías dar la vuelta vilmente y partir sin despedirte- Pero acaso ¿no es más de sentido común hacerte a un lado si no vales nada?-Qué no valgo nada te atreves a decir jajá, si yo recuerdo como llorabas, como gritabas y te escondías cada vez que alguien mencionaba mi presencia, como te estremecías de miedo y te aferrabas a los brazos de tu madre pues la angustia que yo te provocaba te invadía-¿eh? …siento desilusionarte pero tú ¡oh recuerdo mío! tú has sido encaminado a una ruta sin sentido, el coco, el coco no existe-Qué no existe dices, ¿Quién puedes ser tú para juzgar el derecho que tengo de existir y los fundamentos por los cuales ocupo un lugar en tu cabeza? Por generaciones he estado presente en cada ser humano que ha poblado la tierra, soy tan sólo el recuerdo exiliado de tus temores y represento lo único que vale la pena de ellos-.
Estoy loco –pienso- y mi cabeza sigue balbuceando, poco a poco mis sentidos se degradan, el aroma de la madrugada apenas es perceptible, la imagen poco reconocible de la habitación se torna cada vez más y más oscura, la ventana de mi esencia se cierra por fin… estoy dormido.
La mosca aletea y trata de escapar rompiendo el acuerdo del silencio, en cuyo intento de escape le es arrebatado un apéndice alar, la araña se acerca, coloca sus brazos alrededor de la víctima, y ésta a su vez es consumida por aquel veneno inyectado íntimamente en su cuerpo, como la esencia de un amante que ha dejado después de su marcha, de este modo su existencia se ha consumado, la araña se apresura a cubrir a su desdichada presa ¡oh, jugosa y exquisita! ha de pensar motivada por el instinto cruel de la supervivencia, mas es cuidadosa y sólo la resguarda envolviéndola galantemente para después, silencio shh… shh… tranquilidad, el viento traspasa las barreras físicas y acarrea el desorden. El juguete olvidado…soldado de plomo, ¿escuchas el viento?, lo detectas tan sutilmente como la flor de noche percibe al murciélago tomando su néctar, esperas ahí sentado aguardando soldado de plomo, destinado a cumplir tu última orden, elegido a compartir la dualidad de las sombras y la luz de la luna, escenario dramático que te ha relegado, así descansas tú, inmutable ahí debajo de la cama, o ¿no es así?
De repente el acto esperado, la cama tiembla; se pueden escuchar sus tablones estremecerse y doblarse, las patas que la sostienen no soportan la presión, las vetas rechinan, se exprimen retorciéndose; pronto la cama comienza a quebrantar su esqueleto…-¿Qué pasa? -pregunto asombrado-. Recién despierto y contemplo aquella escena donde me encuentro sentado sin saber que ocurre, mi cuerpo apenas está cubierto por las sabanas, la cama no deja de moverse. En un giro desesperado busco mis zapatos, pero cual fuese mi sorpresa para motivar mi desdicha, el suelo apenas es reconocible, mis zapatos no están pero es lo que menos importa, aquella cara dura que siempre ha mostrado el suelo da paso a una mezcla amorfa de materiales que se asemejan a la unión de guerra y lodo digna de un cuadro de Dalí, mis pupilas se contraen, el pulso se acelera, mi corazón no duda al palpitar y en un instante todo cesa pfff -¿Estaré a salvo?- La cama ha sido parcialmente tragada por el suelo, apenas ha sobrevivido.
Soldado de plomo ¿Qué ha ocurrido? hasta tú has sido acarreado a la angustia de la escena y sobreviviste blandiendo la pequeña espada sujeta a tu brazo; apenas asoma tu cabeza, has sido el único testigo junto a mí, de lo ocurrido dame una explicación, ¡te lo imploro! -¿Estoy loco de nuevo?-... silencio… tú araña, adónde has desaparecido, ahí estas, aún puedo observar el brillo de la luna en tus ojos y delata tu posición porque te has escondido cual cobarde, no fue así cuando tragaste a la mosca…silencio.
No puedo esperar sentado un segundo más, desciende mi pie izquierdo hasta hacer contacto con el suelo… tic… tac…tic…tac…tic… el reloj se detiene, el suelo es tan frío, arrgh súbitamente el suelo se parte y de él emerge un brazo en semi descomposición, las marcas de heridas son recientes, los moretones son apenas visibles en la oscuridad, toma mi pierna, arrgh!!! duele demasiado, comienza a tirar hacia abajo con tremenda fuerza que apenas sobrepasa los límites humanos de la mía, trato de sujetarme –¡oh piadoso señor ten misericordia de mi!- mis manos sujetan con firmeza los extremos de las sábanas, las fibras de los hilos comienzan lentamente a quebrarse, ya no pueden más al igual que yo, mi cintura es sujetada por otro brazo, la tela se desgarra de la misma forma que mi fuerza y caigo en un vasto precipicio… tac…tic, tac el reloj retoma su movimiento yo, yo sigo cayendo, un súbito escalofrió, hace brecha en mi espina dorsal, al llegar a mi cuello se detiene y se torna hacia mi oído -soy el coco-apenas visible un trozo de sabana se desprende y flota sutilmente descendiendo a través del único puerto visible entre mi habitación y la nada, mi cara cubierta de sudor recibe una gota de lágrima que rueda escapando al canto de alguno de mis ojos, una mueca restira la facies de mi cara, y yo sonrío…
…Tic tac el reloj ya no suena para mi, el último haz de la luz de la luna desaparece en el vacío, cae junto a mi cuerpo sin vida a las puertas del mundo oscuro.
En la escena de lo que nadie jamás presencio, la cama yace ordenada, el suelo es tan duro y frío como siempre lo fue, la araña trampera aguarda a su invitada, el soldado de plomo sigue soñando con volver al campo de batalla, una mosca persiguiendo su libertad trata de cruzar el vidrio de la ventana, la cual deja pasar el primer haz de luz de sol, aquí nada pasa, ningún recuerdo permanece en el olvido, los exiliados cobran venganza y la ironía es la única que vence al final, yo, yo tan solo permanezco ahí tendido sobre las sábanas, traspasando un portal hacia el mundo negro, el mundo de las pesadillas… tic tac tic tac.
My name is Nightmare...
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